Los diputados porteños votaron un aumento del 10% para sus sueldos
Argumentaron que el año pasado no habían tenido ningún incremento.
Luego de frustrarse el tratamiento de la ley contra los motochorros, a última hora de la sesión del jueves los legisladores aprobaron un aumento de un 10% en sus sueldos.
Así, lo que hasta el mes pasado era un sueldo bruto de $ 12.835 pesos, ahora pasará a $ 14.118. En mano, serían alrededor de unos $ 11.000, según cada caso.
Para justificar la medida los diputados consultados por Clarín hicieron hincapié en que perciben menos dinero por mes que muchos funcionarios especialmente del Poder Judicial de la Ciudad. El proyecto contra los motochorros no pudo debatirse sobre tablas porque no se lograron los dos tercios de los diputados necesarios.
Los legisladores consultados por Clarín pidieron, salvo Cristian Ritondo del PRO y Martín Hourest de Igualdad Social, anonimato a la hora de opinar sobre el tema. En general, las reacciones apuntaron hacia lo mismo: el año pasado, se priorizó darle un aumento a los empleados de la Legislatura, mientras que los legisladores sólo recibieron una suma fija de $ 500 a partir de enero.
“No podemos pasar el celular, ni estacionamiento, ni almuerzos. No es un aumento desproporcional, me parece lógico”, dijo Ritondo ayer. Y agregó que: “A diferencia de muchos empleados de la Ciudad, nosotros no tenemos antigüedad ni jubilación, por ende me parece bien que si el año pasado no ajustamos nuestros sueldos, ahora sí lo hagamos”.
Un diputado peronista –que no logró recordar su actual salario– sí se quejó: “No nos pagan los almuerzos, la cochera ni los gastos de representación, no está mal que nos ajustemos el sueldo”.
Desde el bloque Diálogo por Buenos Aires, que preside Eduardo Epszteyn, dijeron a Clarín: “el defensor general ante el Poder Judicial gana $ 45.000, un fiscal general $ 35.000, y un secretario de Cámara, que es un rango menor, hasta 18.000 por antigüedad ¿Qué tiene de raro que ajustemos nuestro sueldo?”, se preguntó.
Hourest, habitual aliado del ibarrismo, dijo que “los salarios están atados a una paritaria, se debió haber respetado eso por más que los sueldos no sean altos comparados con otros poderes”.
Desde Nuevo Encuentro, bloque que responde al diputado nacional Martín Sabbatella, un legislador indicó: “pago una fortuna de Impuesto a las Ganancias, me quedaban en mano menos de $ 8.500, no me parece un exceso este ajuste, teniendo en cuenta que no podemos pasar gastos”.
La página web de la Legislatura porteña no informó sobre esta aprobación, aunque encabezó su boletín con la prohibición de la venta libres de auriculares, proyecto del diputado Raúl Puy.
Fuente Clarín
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