Revista mi Barrio

Periódico barrial de Villa Real y Versalles, barrios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El pintor Florencio Molina Campos en Estados Unidos

diciembre 4, 2017

Molina Campos es muy recordado por sus inolvidables almanaques de Alpargatas. También es interesante poner a la luz su intensa trayectoria en Estados Unidos.

Su primer viaje sucede en 1937, cuando obtiene una beca otorgada por la Comisión Nacional de Cultura. Su deseo es dedicarse a producir films educativos para enseñar sobre la vida y las costumbres del gaucho. Llega a Nueva York y el “The Evening Star” de Washington le dedica un artículo de cinco columnas con su foto.  Uno de sus primeros trabajos fue una tarjeta navideña: El gaucho Lindor Pintor en Nueva York. La Revista Life titula: “F. Molina Campos. “He paints the cowboys of Argentina Pampas”. Time, en la sección Arte, publica una nota del artista con dos reproducciones de sus obras. The Geographical Magazine recrea una boleada de avestruces de Alpargatas en un artículo sobre Sudamérica y hace una referencia del pintor. El 25 de Mayo da una charla en la Universidad de Columbia, donde habla de la Patria y de la vida argentina. Se  lo llama el “gran intérprete de los gauchos. Expone en Palm Spring de California. Se hacen eco los periódicos de Texas, Los Ángeles,  Kansas, etc. Sus trabajos impactan.  Dona varias obras para una exposición permanente en la Universidad de Texas en Austin. Los diarios La Opinión de República Dominicana, El Relator  de Colombia, Mi Diario  de Chile y El Comercio  de Lima traen importantes artículos sobre el artista.

 

La revista Liberty lo contrata para hacer una serie denominada “Andanzas de un gaucho en Nueva York”. La firma Shell, confiado en el éxito de sus dibujos, encarar una campaña publicitaria  de seguridad vial que aparece en las revistas: Life, Collier,etc

 

Molina Campos comienza a pintar negros estadounidenses.

 

Vuelve a Buenos Aires. El 9 de Julio de 1939, la Revista Caras y Caretas publica a todo color  y doble página: “Molina Campos viene de pasear por Estados Unidos, a sus famosos gauchitos”. En 1942, Disney lo contrata para que lo asesore para hacer  tres cortos: “Saludos amigos”; “Goofy se hace gaucho” y “El gaucho reidor”.  Molina Campos se da cuenta que las películas estaban muy avanzadas y que contenían errores fundamentales, fruto de los pocos conocimientos del campo. El arreglo económico era muy ventajoso y le daba prestigio pero desiste de realizar el trabajo.   Nelson Rockefeller lo invitó a su rancho en Texas para que pintara los cow-boys de la misma manera que los gauchos. Molina Campos convivió un tiempo con los grandes jinetes participando de los rodeos, pero le dijo “… no puedo mentirle: pintaría sus cuerpos y sus ropas, pero jamás penetraría en su alma. No quiero estafarlo”.

 

Disney lo invita a una noche de gala en el Metropolitan Opera House y tiene la sorpresa de compartir el palco con Charles Chaplin: “cuando yo era joven, nunca olvidaré que le vi a usted en Buenos Aires en nuestro Teatro Casino en un espectáculo llamado Tingel Tangle”.  Expone junto a Disney en Laguna Beach  Art Gallery. La Opinion de Los Angeles publica un artículo con la foto del artista y la reproducción de un cuadro: “Artista argentino conquista numeroso y entusiasta público” La Revista Newweek edita un poster de Molina Campos titulado “América Unida es la Paz del Mundo”… un cow-boy de a caballo que le tiende la mano a un gaucho también de a caballo que lo espera con la mano abierta. Posteriormente la misma revista dedica un artículo titulado: “El Gaucho de los Gauchos”.

 

Su presencia era una auténtica tentación para las empresas comerciales. La firma Minneapolis- Moline Power Implement Co, especializada en la fabricación de implementos agrícolas lo contrata para publicar una serie de almanaques con imágenes del campo argentino.  El primero aparece en 1944 y siguió consecutivamente hasta 1958.

 

El Príncipe Guillermo de Suecia le agradece  el cuadro obsequiado de un gaucho. También el presidente de Estados Unidos, D.  Eisenhower y le cuenta que ocupará un lugar preferencial en la Casa Blanca. Sucederá lo mismo con Richard Nixon. Era común hacerlo en atención por haber sido invitado como huésped oficial y por el trato recibido.

En 1949 se encuentra con un fabricante de telas que quiere usar sus motivos gauchescos Llegará a un acuerdo con el señor Shapiro y las telas saldrán a la venta.

 

En todos los viajes llevaban la bandera argentina y un tarrito de tierra del rancho de Moreno, que lo besaba “a hurtadilla” cuando sentía nostalgia. Compró un auto Ford para recorrer el país y una casa en Pacific Palisades, California. Adapta  la vivienda a la manera de un rancho criollo. El cónsul argentino en los Ángeles, Sr. Lazcano Tegui, organiza  la fiesta del 25 de mayo. Molina Campos convierte el garage en una pulpería  y en la puerta ata un caballo con su montura. Asisten gauchos y cowboys.  Florencio tuvo la oportunidad de enseñar a Fred Astaire a bailar Malambo en los talleres de la  Paramount.

 

Es invitado a exponer en Museo de San Francisco, en la revista Examiner comenta el crítico de arte Alexandre Fried: cuando vi las caricaturas del  argentino pensé que era el hombre para ilustrar Don Quijote.

En Nueva York  se publica el libro “Vida Gaucha”, con texto en castellano para estudiantes de nivel primario con ilustraciones del pintor.

 

En un reportaje realizado en Nueva York dijo: “el cine para mi  es el instrumento educativo  de nuestra época, por excelencia. …para la difusión del costumbrismo folklórico…para que no se borre jamás la fuente inspiradora de nuestra nacionalidad…el gaucho. La firma aérea Panagra, edita afiches y postales con trabajos de Molina Campos. Dos anglo-argentinos, aviadores de combate en Inglaterra, miembros de la  Real Fuerza Aérea destacados en la India, pintaron en los aviones, sus personajes.

 

Will Rogers,  humorista norteamericano recorrió el mundo con su espectáculo de vaqueros  y  jineteadas. Se convirtió en uno de los más grandes admiradores de Molina Campos. Todos los años, mandaba a pedir a Buenos Aires, los almanaques de Alpargatas y decía: “Este hombre sabe más que yo de campo”.

 

Molina Campos realizó cuatro viajes y vivió siete años en E.E.U.U.…fue apreciado, buscado y hasta disputado… mimado y  admirado sin condicionamiento de ningún tipo.

 

Molina Campos falleció en Buenos Aires,  el  16 de noviembre de 1959  los 68 años

 

Susana Haydee Boragno

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cantidad de Caracteres   6335

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *